Grabado en La Chulona, el estudio que el guitarrista Álvaro Escribano regenta a las afueras de la capital madrileña, “Road to Swampland”, nos permite observar el cuidadoso trabajo de cocción realizado por el sexteto desde su formación en agosto de 2017. Sonido propio, rockero y sin ataduras.
Échalo un «oidazo»
El álbum se compone de diez cortes en los que desde la inicial “Vice City” bajo el influjo de grupos como Hellacopters o Radio Birdman. Swampig opera en territorios lo suficientemente amplios como para aglutinar las enseñanzas de los Bellrays más sugerentes en “Au Au”, los Detroit Cobras más sólidos en “Faith” o una actualización de grandes nombres como The Who en “She Sings”. Todo ello con dos filtros catalizadores: el rock and roll –“Trench” es buen ejemplo de ello– y el toque justo de actitud punk-rock que asoma en canciones como “One Way Street” y “Mirror on the Wall”.
Las letras del disco –que se publicará en vinilo y digital el 25 de septiembre– son de amplio espectro. Pueden abordar asuntos banales, pero también adquieren compromiso con temas cruciales como la igualdad de género. Cuestiones como la orientación sexual o el modo de vida adquirido al militar en la música forman parte de su universo lírico.
Grandes, se os ve a la legua!!! Y con una batería así, está claro que tenéis mucho camino por delante! me alegra esta gran noticia.